Solomon Hasdak es un policía católico retirado de Bangladesh, que tras regresar a su pueblo natal decidió ayudar a su diócesis a construir una nueva capilla que lleve esperanza y mantenga viva la fe de su pueblo.
Según señaló en un comunicado la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada, en Bangladesh la mayoría de habitantes son musulmanes, mientras que los católicos son minoría y se caracterizan por vivir en zonas muy remotas y ser pobres.
La mayoría de católicos trabajan "como jornaleros o son campesinos con pocas tierras" y viven del día a día, explicó ACN.