El Papa Francisco advirtió este 1 de septiembre que la liturgia es obra de Cristo y de la Iglesia y debe ser alegre, pues "no es algo de museo", pero "no como una fiesta mundana".
"La liturgia es obra de Cristo y de la Iglesia, y como tal es un organismo vivo, como una planta, no se puede descuidar ni maltratar. No es un monumento de mármol o de bronce, no es algo de museo. La liturgia está viva como una planta, y debe ser cultivada con cuidado", dijo el Papa al recibir a una asociación italiana de profesores sobre liturgia.
Además, el Papa Francisco señaló que "la liturgia es alegre, con la alegría del Espíritu, no una fiesta mundana. Por eso, por ejemplo, una liturgia de tono fúnebre no va. Es siempre alegre, porque canta alabanzas al Señor".