Un niño boliviano de 12 años, que desde la edad de ocho sufre una enfermedad que disminuye las funciones de su cuerpo y que ha sido sometido a varias intervenciones quirúrgicas entre ellas un trasplante de médula, prefirió cambiar un viaje al Mundial FIFA Brasil 2014 para ir a Italia a conocer al Papa Francisco.
El pequeño Cristofer quien por su condición física es trasladado en silla de ruedas, participó el pasado lunes 23 de junio en la Misa matutina que el Santo Padre celebra en la Capilla de la Casa Santa Marta.
Al finalizar la Misa, el niño quien estaba acompañado de sus padres y su hermano, tuvieron un encuentro con el Pontífice quien lo bendijo y recibió el regalo que el mismo Cristofer había elegido para él, una pelota de fútbol del Club Bolívar que por la clasificación de la Copa Libertadores enfrentará el próximo mes a San Lorenzo, el equipo argentino del Papa.