El médico peruano Carlos Morín defendió este martes ante el juez la legalidad de todos los abortos practicados en sus clínicas privadas de Barcelona y la profesionalidad del equipo médico imputado, que ha sido acusado por el fiscal de haber practicado más de cien abortos ilegales en 2007.
En el juicio que se celebra en la Audiencia de Barcelona, Morín se ha negado a responder a las preguntas de la fiscal y de las acusaciones, y únicamente lo ha hecho a las preguntas de su abogado, en las que rechazó haber cometido delitos de aborto: "todas (las interrupciones de embarazo-abortos) se hacía en las semanas legales", recalcó después en declaraciones a los medios.
Morín ha asegurado que no ha falseado ninguna historial de sus pacientes y que las clínicas contaban con un equipo de psicólogos "con sus propias dependencias" que analizaban la idoneidad de la intervención.