El Papa Francisco sigue "sorprendiendo" a todos con su humildad. Al principio o al final de las Misas en estos días en la capilla de la residencia de Santa Marta en el Vaticano, se sienta en las últimas sillas para rezar, como un fiel más.
La imagen ha sido difundida por diversos medios italianos y recorre las redes sociales desde hace algunas horas.
Francisco, que sigue alojado en la residencia de Santa Marta hasta que esté acondicionado el apartamento papal cuyos sellos ya han sido retirados, aprovecha estos días para celebrar la Misa de las siete de la mañana con personal del Vaticano, como solía hacer Juan Pablo II.