Decenas de jóvenes argentinos se apostaron el 23 de septiembre en el atrio de la Catedral de La Plata (Argentina), rezando el Rosario, para defenderla del ataque organizado por los lobbies abortista y gay, además de grupos anticristianos de izquierda.

Según relató a ACI Prensa uno de los jóvenes que defendió la Catedral de La Plata, la degeneración promovida por los grupos abortistas llegó al punto de que algunas mujeres se descubrieron los senos ante los jóvenes que rezaban, rompieron varios rosarios y una de ellas frotó un rosario entre sus genitales y lo arrojó a quienes rezaban en el atrio de la iglesia.

La marcha anticristiana, que ponía en riesgo al templo católico, fue convocada por la Coordinadora de Organizaciones y Movimientos Populares de Argentina (COMPA), y reunió a organizaciones izquierdistas y promotores de la ideología de género, del aborto y del mal llamado “matrimonio” homosexual.

La agresiva manifestación comenzó en un “campamento” de promoción de la ideología de género en la Facultad de Agronomía de la Universidad Nacional de La Plata, desde donde se movilizaron a la Catedral de la ciudad, donde paralelamente se realizaba un evento pro-vida.

La actividad, según los propios manifestantes, estuvo enmarcada en la celebración del 28 de setiembre, en que los abortistas celebran el “día de la lucha por la despenalización y la legalización del aborto en América Latina y el Caribe”.

En un comunicado remitido a ACI Prensa el 26 de setiembre, el grupo de Acción Nacional Católica (ANC), uno de los que defendió la catedral platense y que colgó un video del hecho en YouTube, señaló que ese día “los defensores, soldados de Cristo y de su Iglesia, entendimos desde el primer momento que debíamos acudir por deber, pero agradeciendo al Cielo el inmenso don de poder estar cumpliendo esa hermosa tarea”.