El Cardenal Angelo Bagnasco se despidió en la noche del miércoles 24 de junio de su ministerio como Arzobispo de Génova (Italia) con la celebración de una Misa solemne en la Catedral de San Lorenzo.
A finales de mayo, el Papa Francisco aceptó la renuncia del Purpurado al cumplir 75 años de edad y llamó a Mons. Marco Tasca para sucederlo. El Cardenal Bagnasco, que también presidió la Conferencia Episcopal Italiana, se despide después de dirigir la Arquidiócesis cerca de 14 años.
"Ahora que he llegado a la última rampa de mi peregrinación, me gustaría dirigirles unas palabras más", dijo el Cardenal al inicio de su homilía.