El movimiento extremista musulmán del Estado Islámico (ISIS), tomó este jueves la mayor ciudad cristiana de Irak, Qaraqosh, provocando la huida de decenas de miles de personas de esta y otras zonas aledañas que fueron abandonadas anoche por las tropas kurdas que tratan de detener este avance.
"Es una catástrofe, una situación trágica. Llamamos al consejo de seguridad de la ONU a intervenir de inmediato. Decenas de miles de personas aterrorizadas están siendo expulsadas de sus casas en el momento en el que hablamos, no podemos describir lo que está ocurriendo", declaró a la AFP el Arzobispo caldeo de Kirkuk y Suleimaniya, Mons. Joseph Thomas.
Qaraqosh se encuentra entre Mosul –en la cual ya no hay cristianos-, y Erbil, la capital del Kurdistán iraquí, cuyo gobierno, junto a los kurdos de Turquía y Siria intentan detener el avance de los extremistas musulmanes.