Más de 60 expertos en bioética -entre médicos, biólogos, juristas, académicos y filósofos- suscribieron la Declaración de Guanajuato, respaldando a Costa Rica frente a la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por prohibir la fecundación in vitro en su legislación.
El documento, suscrito en abril de 2013 en Guanajuato (México), pone en evidencia las "deficiencias de la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos" en el caso de Costa Rica, criticando "las imprecisiones científicas y jurídicas de la sentencia".
En diciembre de 2012, la CIDH condenó a Costa Rica por prohibir en su legislación la fecundación in vitro (FIV), y abrió con su sentencia las puertas al aborto en toda América Latina, al asegurar que "el embrión no puede ser entendido como persona" y redefinir arbitrariamente la concepción, asegurando que esta "tiene lugar desde el momento en que el embrión se implanta en el útero".