29 de enero de 2014 / 03:29 PM
El Arzobispo de Corrientes (Argentina) y amigo del Papa Francisco, Mons. Andrés Stanovnik, hizo una breve e interesante reflexión del episodio ocurrido hace unos días en la Plaza de San Pedro, luego de que las dos palomas que el Santo Padre soltara acompañado de dos niños, fueran atacadas por un cuervo y una gaviota.
Sobre el episodio de las palomas, Mons. Stanovnik dijo que "hay que poner atención al mensaje de esa alegoría porque refleja el mundo en el que vivimos (…) La propuesta del Papa es una propuesta de paz y, al mismo tiempo, una alerta para no dejarnos tentar por 'los cuervos' que llevamos adentro y que destruyen nuestros vínculos con los demás".
Estos vínculos o ámbitos que son asediados por estos "cuervos" internos, comienzan "por el mundo más cercano y cotidiano que es la pareja, la familia, los vecinos, la comunidad y desde allí la sociedad en la que vivimos".