El Cardenal Robert Sarah regresó al Vaticano luego de visitar Medio oriente como enviado especial del Papa Benedicto XVI para hacer un llamado a la paz y entregar un millón de dólares de parte del Pontífice en ayuda humanitaria para Siria y otros países en conflicto.

El Cardenal Sarah dirige el Pontificio Consejo Cor Unum fue nombrado por el Santo Padre para visitar la región y llegó a Beirut (Líbano) al no poder ingresar a Siria por razones de seguridad.

La autoridad vaticana regresó a Roma luego de reunirse con los desplazados sirios que se refugian en el país vecinoy los responsables de la Iglesia local. El Purpurado también se reunió con 20 agencias caritativas católicas que trabajan en Líbano, Siria, Jordania, Turquía e Irak.

En una entrevista concedida a Radio Vaticana, el Cardenal Sarah explicó que “la Iglesia local sintió gran emoción ante esta misión querida por el Papa para estudiar en el lugar lo que podemos hacer para ayudar a la población de Siria que se encuentra en tierra libanesa, en condiciones humanas y sanitarias muy difíciles”.

El millón de dólares donado por el Papa se distribuirá entre las agencias caritativas católicas de la región. Se ha dado prioridad a Siria, por tener más de dos millones de desplazados, a la que se destinarán 700 mil dólares, mientras que los otros 300 mil, serán distribuidos a las otras Caritas en Turquía, Líbano, Jordania e Irak.

“Es un pequeña gota, cuando se ve la necesidad, pero ha sido un donativo verdaderamente apreciado por la población. Pedimos a otras organizaciones caritativas de la Iglesia que aumenten su generosidad, porque sabemos que la guerra puede causar más desplazados y se podrá necesitar más ayuda”, dijo.

El enviado del Papa, expresó su tristeza por las dificultades en las que se encuentran los refugiados en los campos, donde falta el agua, la luz y todo tipo de medidas higiénicas.

El Purpurado recibió testimonios sobrecogedores como el de una madre con un niño de cuatro meses que llorando pedía que salvaran a su pequeño, o el de una mujer musulmana, cubierta con un velo, que agradeció entre sollozos la ayuda recibida y dijo a la autoridad vaticana: “ustedes me han tratado como un ser humano. Me han devuelto mi dignidad, esa que no encontré nunca en mi comunidad religiosa”.

Los musulmanes perciben la caridad católica

Según refirió el Cardenal Sarah, los musulmanes están percibiendo de manera positiva cómo la Iglesia se dirige y trata a los seres humano, en especial a los más necesitados.

Además, aseguró que Caritas Líbano está haciendo un gran trabajo para ayudar a los Al anunciar la donación de un millón de dólares y la intervención directa de la Iglesia en el conflicto mediante el Cardenal Sarah, el Papa Benedicto XVI advirtió que “un día podría ser demasiado tarde”. Sobre este pronunciamiento, el Card. Sarah expresó que la comunidad internacional está reaccionando, y “no debemos excluir a Dios en las negociaciones”.

“La voz del Santo Padre, su exhortación a rezar por Siria, me parece una voz importante y no sólo para Siria, sino para todos los lugares del mundo donde hay conflictos que siembran sufrimiento y muerte”, y “los cristianos debemos rezar, porque el Señor ha dicho: sin mí no podrán hacer nada”, concluyó.