El Papa Benedicto XVI explicó que todos los deportistas, por encima de cualquier logro o conquista, están llamados primero que nada a la perfección moral y espiritual.
Así lo indicó en su discurso a los representantes del 32º Congreso Mundial de Medicina del Deporte, que por primera vez se han reunido en Roma en su congreso bienal. Han participado en el mismo 117 países de los 5 continentes.
Tras recordar las recientes Olimpiadas y Paralimpiadas realizadas en Londres (Inglaterra) como ocasiones para "unir a las personas y los pueblos en la búsqueda común de la excelencia competitiva pacífica", el Santo Padre resaltó la dimensión espiritual de quienes practican algún deporte.