El Papa Francisco se dirigió ayer por la noche al hospedaje donde se alojó los días previos al Cónclave y pagó la cuenta de su estadía pese a que los encargados no querían recibir el dinero.
Un testigo del hecho aseguró que los administradores de la Casa Pablo VI para sacerdotes no querían recibir el dinero pero el Papa Francisco insistió hasta que lo aceptaron. "Es lo justo", les dijo.
Antes de acudir al hospedaje, el Santo Padre comentó con los cardenales en la Casa Santa Marta que "también debo pasar por la residencia, tomar mis maletas y pagar la cuenta".