El Comité Permanente de la Conferencia Episcopal Chilena (CECh) visitó a la presidenta electa Michelle Bachelet para desearle fecundidad en su mandato.

El Arzobispo de Santiago y Presidente de la CECh, Mons. Ricardo Ezzati, explicó  al finalizar el encuentro que el pueblo de Chile había manifestado su voluntad al elegirla como presidenta y esperan que las expectativas y esperanza puesta sobre el nuevo gobierno puedan fructificar.

También mencionó que si bien la Iglesia no es una institución política, "tenemos los mismos destinatarios, que son los hombres y mujeres de Chile y, por consiguiente, nos interesan los hombres y mujeres de Chile, y como siempre estaremos desde nuestra identidad listos para apoyar todo lo que sea el desarrollo integral de la persona y de todas las personas".

Los obispos chilenos ya plantearon su visión sobre el desarrollo del país en la Carta Pastoral "Humanizar y compartir con equidad el desarrollo de Chile", documento que fue entregado en septiembre de este año a todos los candidatos presidenciales. Sobre esto, Mons. Ricardo Ezzati dijo que la presidenta electa la conoce, la ha estudiado y se siente muy agradecida por el aporte.

La socialista Michelle Bachelet fue elegida presidenta por segunda vez. Su anterior periodo fue del 2006 al 2010. En estas elecciones, obtuvo el 62% de los votos el domingo 15 de diciembre, derrotando a la candidata del oficialismo Evelyn Matthei, con quien compitió en segunda vuelta.

Las votaciones se caracterizaron por un porcentaje histórico de abstención, que llegó al 58%. Al respecto, Mons. Ezzati, señaló que respetaba "la libertad de quienes han optado por no votar, pero no puedo dejar de decir que el bien común que es un derecho que se construye con el aporte de todos", a lo que agregó que el bien común es un derecho de todo ciudadano, pero que construirlo también es un deber y su esperanza es que una auténtica educación cívica llegue a ser patrimonio de todos.

Tras el encuentro con la mandataria electa, Mons. Ezzati también se refirió al respeto a la vida, que pasa por un conjunto de valores que hacen que la vida humana se pueda desarrollar y realizar con plenitud y con gozo, entre los que mencionó la dignidad del trabajo, la vivienda, la educación, el respeto por el trabajo digno, con salario justo.

Finalmente, se refirió a las reformas propuestas por Michelle Bachelet, entre las que se encuentran la laicidad del Estado. Mons. Ezzati dijo que este tema no fue abordado en la reunión pero que el Estado de por sí es laico, por lo cual, es respetuoso de todas las creencias y "sabe que la fe y las creencias de las personas son parte integral del desarrollo de una persona y por consiguiente, del desarrollo de una sociedad".