Tras una demanda presentada por una agrupación atea en Brasil, una jueza ordenó que se prohíba la instalación de una estatua gigante de Nuestra Señora Aparecida en la ciudad de Aparecida, así como eliminar otros monumentos dedicados a la patrona del país.
La demanda de la Asociación Brasileña de Ateos y Agnósticos (Atea) fue aceptada por la jueza Luciene Bela Ferreira Allemand este lunes 21 de octubre. El municipio, por su parte, asegura que apelará la decisión.
La prohibición afecta a una escultura gigante donada por el artista Gilmar Pinna. Las piezas de la obra, que quedó en etapa de construcción, se encuentran cerca de Via Dutra, la principal carretera entre Sao Paulo y Río de Janeiro, las dos ciudades más grandes de Brasil.