Benedicto XVI concedió recientemente una entrevista en la que recordó su estrecha amistad con el Beato Juan Pablo II, la intensa relación que el Papa polaco tuvo con Dios, sus principales encíclicas, sentido del humor y defensa de la verdad, aspectos que durante los años de colaboración le permitieron tener clara la santidad de su predecesor.
"Que Juan Pablo II fuera un santo, en los años de la colaboración con él me ha sido continuamente cada vez más claro. Hay que tener en cuenta ante todo naturalmente su intensa relación con Dios, ese estar inmerso en la comunión con el Señor", afirmó el Sumo Pontífice Emérito al periodista polaco Wlodzimierz Redzioch.
Durante la entrevista difundida el 20 de abril por el diario español La Razón, el exPrefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe destacó también "la valentía" con que Juan Pablo II "asumió su tarea en un tiempo realmente difícil".