13 de febrero de 2013 / 06:50 AM
En medio de los aplausos y entre grandes muestras de afecto, sostenido por la certeza de que Cristo nunca deja de cuidar a su Iglesia, el Papa Benedicto XVI recordó, en su penúltima Audiencia General de hoy celebrada en el Aula Pablo VI, el anuncio de su renuncia el lunes 11 de febrero. El Santo Padre exhortó a seguir rezando por él, por todos los fieles y por el futuro Pontífice.
Se trata de una decisión que, como él mismo dijo, ha tomado siendo "profundamente consciente de la gravedad de este acto", pero, al mismo tiempo "consciente, de no tener ya la capacidad de ejercer el ministerio petrino con el vigor que el mismo requiere":
A continuación sus sentidas palabras al inicio de la catequesis que dedicó a la reflexión sobre el tiempo de Cuaresma que se inicia hoy con el Miércoles de Ceniza: