24 de septiembre de 2015 / 06:30 AM
Se trata de un nuevo episodio de descarte de una vida humana. El pasado 27 de julio en Sicilia nació Marianna, quien recibió también el segundo nombre de Bergoglio por el Papa Francisco, Jorge Mario Bergoglio.
Desde que nació, la pequeña no ha vuelto a tener contacto con su madre natural, una mujer que, junto a su pareja, la dejó en el hospital después de dar a luz.
Según Radio Vaticana, con información de Redattoresociale, la mujer habría descubierto una malformación cerebral de la niña en la última ecografía ya que durante el embarazo no habría acudido a ningún ginecólogo.