En la madrugada del 25 de septiembre, un grupo no identificado ingresó a la parroquia San Ignacio de Loyola, el templo católico más antiguo de Buenos Aires (Argentina), muy cerca del centro de la ciudad, y realizó diversos destrozos, pintas, e incluso encendieron fuero al interior.

Las autoridades se encuentran investigando los hechos tras la denuncia realizada por el párroco, Padre Francisco Baigorria, integrante de la Comisión Arquidiocesana para el cuidado de los Bienes Artísticos y Culturales.

Se sospecha que quienes atacaron la iglesia ingresaron por túneles que conectan el templo con edificios cercanos.

La comunidad en la zona se remonta al siglo XVI, cuando llegaron los primeros jesuitas a Buenos Aires. Si bien el templo estuvo en un principio bajo la advocación de Nuestra Señora de Loreto, en 1610, al ser beatificado San Ignacio de Loyola, fundador de la Compañía de Jesús, fue rebautizada con su nombre actual.