Superando las presiones feministas y las manifestaciones en los exteriores de sus instalaciones, los médicos del Hospital Mariano y Luciano de la Vega, de la localidad de Moreno, en la provincia de Buenos Aires (Argentina), rechazaron someter a un aborto a una niña de 13 años, embarazada tras ser violada por su padrastro, pues a sus 23 semanas de gestación el procedimiento pondría su vida en peligro.
A pesar de la negativa de los médicos, velando por la salud de la niña, la portavoz de la organización feminista Mujeres al Pie del Cañón, Lorena Alderete, encabezó una protesta exigiendo "que se realice el aborto no punible a la niña abusada por su padrastro", según reporta el diario argentino Clarín.
A la presión contra el hospital se sumó la diputada Victoria Donda, del Frente Amplio UNEN, que consideró una excusa del director del centro médico el argumentar que la vida de la niña sería puesta en riesgo si se sometiera a un aborto, debido a sus 23 semanas de embarazo.