7 de marzo de 2006 / 07:19 PM
La arquidiócesis de Guayaquil recibió con gran alegría el reconocimiento que la Santa Sede hizo del milagro presentado a la Congregación para la Causa de los Santos, para la canonización de la Beata Narcisa de Jesús Martillo Morán.
La arquidiócesis guayaquileña informó que los médicos de la Congregación para la Causa de los Santos votaron a favor del reconocimiento del hecho milagroso presentado a la Santa Sede en 2001.
Edelmira Arellano era una niña que había nacido sin órgano genital. En 1992 y a la edad de siete años se curó luego de que su madre acudiera al santuario de Narcisa de Jesús y pidiera por la salud de su hija. Ese mismo día la niña acudió al consultorio del médico que la trataba y constató que su condición física era normal.