El eurodiputado del PP y autor del prólogo del libro "Hablando con el Papa" (Planeta), Jaime Mayor Oreja, ha acusado al relativismo, "principal adversario" de la sociedad actual, de "construir una doctrina de falsos derechos" reemplazando el derecho a la vida por el derecho al aborto y el derecho a vivir dignamente por el derecho a morir.

Así lo indicó durante su intervención en la presentación de la obra que recoge el testimonio de 50 personalidades de la política, el deporte y la cultura sobre Benedicto XVI.

"El relativismo ha conseguido eliminar de la Constitución Europea cualquier referencia a las raíces cristianas", ha señalado, para explicar que una de las razones de su avance en Europa es que "nadie habla de él" pues "no tiene adversario".

"Es casi un intangible, invisible, parece un fantasma en todas partes del mundo pero que nadie lo diagnostica porque parece que nadie lo ve", ha añadido.

"Es un fenómeno evanescente sin límites, transversal, capaz de encontrar acomodo en toda ideología, que socializa la nada, que no conduce a la revolución sino al suicidio, también dulce como la tiranía, con capacidad destructora, la moda dominante en la sociedad de hoy, el que determina lo que es políticamente correcto e incorrecto en todos los temas".

Mayor Oreja ha lamentado el hecho de que Europa no se diera cuenta de las consecuencias de la crisis hasta que afectó al confort, lo cual demuestra, a su juicio, "una falta de vigor de la sociedad". Todo ello, lo ha señalado para realzar el legado de Benedicto XVI que ha sido, a su parecer, "el único líder capaz de diagnosticar que el relativismo –y su dulce tiranía– es el principal adversario".

Por ello, para Mayor Oreja, escuchar al Papa decir que le faltaban fuerzas para continuar con su Pontificado, su "decisión ejemplar y trascendental", le ha permitido "reconocer el valor de la verdad".

Según ha indicado, en los tiempos nuevos que se alumbran en el mundo, relativizar todo al extremo está "condenado al fracaso como lo estaban los totalitarismos y las tiranías feroces de los 30 bien de izquierdas o de derechas" y van a ser necesario "caminos profundos: aprender de la crisis, empezar a hacer y decir lo que hoy no se hace y dice, vencer el miedo reverencial a la moda dominante". "La decisión de Benedicto XVI nos interpela", ha concluido.

La periodista Isabel San Sebastián, que ha moderado el acto, ha señalado que comparte con Mayor Oreja "la batalla por la vida desde su mismo inicio hasta su final" a pesar de ser "agnóstica" y ha subrayado que hace falta "mucha reflexión" y "abrazarse a los valores" porque si no es así, a su juicio, "no se saldrá de esta".

Además, ha lamentado "la perversidad de deshumanizar a las personas para así liquidarlas más fácilmente" y ha defendido que, al margen de credos, existen "unos valores universales" como "la vida, la verdad y la dignidad, por los que siempre merece la pena luchar".

Un libro no solo para católicos

Por su parte, uno de los coordinadores del libro, Ignacio Sánchez Cámara, se ha mostrado entusiasmado por este proyecto, no tanto por su condición de católico sino, sobre todo, por su convencimiento de que "el magisterio de Benedicto XVI en este momento de crisis es fundamental tanto para católicos como para no católicos".

En esta línea, ha señalado que, si "el relativismo es parte de la culpa" de la crisis moral, este da lugar a "un mal mayor": "la inversión de valores, tratar de pasar lo torcido por lo derecho, lo malo por lo bueno, lo falso por verdadero". Ante esta situación, a su juicio, la voz del Papa es "la más autorizada que ha combatido ese problema".

El otro coordinador, Francisco Javier Contreras, ha subrayado el hecho de que la obra tome el testimonio tanto de católicos como también de algunos agnósticos "porque la doctrina de Benedicto XVI interpela a todos" y porque no querían un libro "de convencidos para convencidos", solo para "creyentes monolíticos" sino llegar a un público diverso. A su juicio, el magisterio católico posee vigencia actual.

Por su parte, la exsenadora socialista Mercedes Aroz, ha destacado de Benedicto XVI su "claridad" para exponer el mensaje cristiano así como que, en medio de este proceso crisis, haya "llevado la Iglesia a la identidad original, preservado su unidad".

Asimismo, ha subrayado sus esfuerzos por promover el diálogo con la esfera laica y ha recordado las palabras del Papa para defender que, aunque hay divisiones que parecen irreconciliables, hay un terreno, el de los DDHH, en que se puede hallar encuentro y que, más allá de visiones partidistas, hay que crear "una ética única".

Finalmente, el novelista Jon Juaristi, que ha comenzado diciendo que es judío, ha subrayado la importancia de la reflexión de Benedicto XVI sobre el relativismo del "hago lo que quiero: consigna fundamental del buen relativista" que, a su vez, según ha señalado es "la norma más totalitaria a la que es imposible desobedecer".