4 de enero de 2012 / 10:51 AM
En su catequesis de la audiencia general de hoy, el Papa Benedicto XVI explicó que celebrar la Navidad es transmitir con el testimonio de la propia vida la alegría y la luz de Dios a todos.
En el aula Pablo VI y ante unos 7 mil fieles, el Santo Padre explicó que la primera reacción que se experimenta ante la "extraordinaria acción de Dios que se hace Niño" es la alegría. Se trata de un sentimiento "que nace del estupor del corazón al ver cómo Dios se acerca a nosotros, piensa en nosotros, cómo actúa en la historia. Nace al contemplar el rostro de aquel humilde Niño, porque sabemos que es el rostro de Dios".
La Navidad, prosiguió el Papa, es la alegría porque "Dios, que es el bien, la vida, la verdad del hombre, se rebaja hasta el hombre para elevarlo hasta Sí mismo: Dios se hace tan cercano que se puede ver y tocar".