Al comentar las lecturas dominicales fuertemente vocacionales, el Papa Benedicto XVI invitó este domingo durante el Angelus a rezar por el aumento de las vocaciones sacerdotales, a la vez que invitó a los fieles a considerar seriemante el propio llamado vocacional.
El Papa recordó que Dios, de hombres pecadores y débiles, puede hacer intrépidos apóstoles y anunciadores de salvación.
“El encuentro auténtico con Dios lleva al hombre a reconocer la propia pobreza y limitación, el propio límite y el propio pecado. No obstante esta fragilidad, el Señor, rico de misericordia y de perdón, transforma la vida del hombre y lo llama a seguirlo”, dijo el Santo Padre al meditar sobre la llamada divina.