El Presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, Mons. Leopoldo Brenes, advirtió que una posible despenalización del aborto terapéutico "sería un retroceso" y una ofensa al pueblo católico que opta por la vida desde la concepción.
En declaraciones recogidas por la prensa, el Prelado indicó que "es triste que esta situación se dé cuando toda la población nicaragüense presentó 150 mil firmas al Parlamento".
El Arzobispo lamentó que existan organismos interesados en promover una cultura de muerte. Indicó que de prosperar la despenalización del aborto terapéutico, los obispos tomarán en su momento sus propias medidas.