Al recibir a los obispos de la Conferencia Episcopal Panameña, que acaban de realizar su visita "ad limina", el Papa Benedicto XVI pidió inculcar "desde el seminario" a los candidatos al sacerdocio un estilo de vida marcado por el celo apostólico y el testimonio de comunión para que construyan "en ellos el hombre de Dios que los fieles tienen derecho a ver en sus ministros".
El Papa resaltó las iniciativas de los obispos "para sembrar generosamente la Palabra de Dios en el corazón de los panameños, para acompañarlos en el camino de su maduración en la fe, de modo que sean auténticos discípulos y misioneros de Jesucristo".
Según el Pontífice, "la fecunda acción misionera de sacerdotes, religiosos y laicos", contrasta "la creciente secularización de la sociedad, que invade todos los aspectos de la vida diaria, desarrolla una mentalidad en la que Dios de hecho está ausente de la existencia y de la conciencia humana y se sirve a menudo de los medios de comunicación social para difundir el individualismo, el hedonismo e ideologías y costumbres que minan los fundamentos mismos del matrimonio, la familia y la moral cristiana".