El Obispo de San Bernardo, Mons. Juan Ignacio González Errázuriz, destacó que para construir un futuro mejor, los chilenos no deben olvidar sus raíces cristianas. Asimismo, precisó, para transformar la sociedad deben primero cambiar sus corazones teniendo a Dios en el centro de sus vidas.
En su homilía por la Misa de Acción de Gracias y Te Deum por el aniversario de la independencia de Chile, celebrada en la Catedral de San Bernardo, Mons. González explicó que el hilo conductor de la historia de este país en el que se basa "su historia, sus instituciones y sus gentes" es un importante legado de "la fe cristiana".
"Es evidente que entre los desafíos más serios que enfrente Chile al llegar al Bicentenario está el intento de algunos de aminorar y en ciertos casos hacer desaparecer la fe cristiana de nuestra nación, una de cuyas manifestaciones más fuertes es el relativismo como fundamento de la organización de la sociedad", advirtió.