El Presidente del Pontificio Consejo para la Pastoral de los Migrantes e Itinerantes, Cardenal Renato Martino, alentó a respetar la dignidad de los inmigrantes; y recordó que a todos los católicos "se les impone el deber de promover una acción fiel a la tradición eclesial" en relación a ellos.
Para el Cardenal Martino, "las causas primarias y las implicaciones sociales" del fenómeno migratorio comprenden "una larga y complicada lista que exige una acción urgente: pobreza extrema, desequilibrios demográficos, nacionalismos desesperados, dependencia económica, hostilidad y violencia contra los inmigrantes, los refugiados y los extranjeros en general".
"Es cierto –prosiguió el Purpurado vaticano– que el fenómeno de la migración, voluntaria o forzada siempre ha sido parte de la historia humana, pero recientemente ha asumido una dimensión estructural y universal con significados siempre más complejos".