En una carta dirigida a todos cuantos deseen colaborar con ellos, la comunidad católica más apartada de Rusia, ubicada en la ciudad de Murmansk (a 1392 km de San Petersburgo), solicita ayuda para poder construir la iglesia que necesitan.
La comunidad de Murmansk está conformada por polacos, lituanos, bielorrusos, ucranianos y rusos, y se encuentra en el paralelo 68 dentro del Círculo polar Ártico. Está conformada por muchos feligreses bautizados por sus parientes, ante la ausencia de sacerdotes.
En su misiva explican que es para ellos es una gran alegría haber iniciado el proyecto de construcción de una iglesia. "Hemos acudido con los misioneros claretianos, el P. Juan y el Hno Josep, a través de cartas dirigidas a las autoridades de Murmansk pidiendo un solar para construir nuestra iglesia. No ha sido fácil lograr que nos atendieran y oyeran. Hemos hablado con los concejales de nuestra zona para que se interesaran por nuestra situación", afirman.