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Noticias del 25-12-02

 

 

“Serenidad y reconciliación” pide Episcopado venezolano por Navidad

CARACAS, 25 Dic. 02 (ACI).- El Presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), Mons. Baltasar Porras, auguró “serenidad, respeto y reconciliación” para el país con ocasión de la Navidad.

Mons. Porras exaltó los valores que deben prevalecer ahora, a partir de la celebración del nacimiento del Señor Jesús: “la serenidad de espíritu, la reconciliación y el respeto al hermano para no hacer crecer el odio”.

El Prelado destacó también que con ocasión de la Navidad, es importante llamar a todos los venezolanos a “la auto evaluación y el respeto a la vida, la oración y el sosiego”; acciones virtuosas que “pueden mantener incólumes la racionalidad y la firmeza de valores”.

Al referirse al clima de tensión y de protesta –aunque más silenciosa- que marcaron las celebraciones navideñas en el país, el Presidente del Episcopado Venezolano reiteró la importancia del diálogo a través de la Mesa de Negociación que encabeza el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), César Gaviria.

“Este espacio cumple un papel fundamental porque mantiene vigente el diálogo como vía para alcanzar soluciones democráticas”, concluyó el Prelado.

 

Navidad es tiempo de caridad y solidaridad, afirma Obispo argentino

BUENOS AIRES, 25 Dic. 02 (ACI).- En su mensaje por Navidad, el Obispo de Río Cuarto, Mons. Ramón Staffolani, resaltó la necesidad de vivir la caridad en el tiempo navideño y expresó su deseo de estar “cerca de los que más sufren en el alma y en el cuerpo”.

El Prelado pidió a Jesús “que libre nuestros corazones de odio hacia aquellos que suponemos son causa de tantos males en la Patria” y exhortó a que “confiemos en la justicia de Dios”.

El Obispo hizo un llamado a hacer de la caridad cristiana “un camino de unidad y de servicio para todos, en especial para los más pobres. La construcción de la nueva sociedad comienza por la familia, donde se siembran las semillas cristianas del amor solidario, del respeto, de la honestidad y del trabajo como nuestra participación en la obra creadora de Dios”.

Recen y supliquen por la Patria. Pues todos debemos comprometernos a usar la bondad y la buena educación en el trato diario para evitar la agresión y las heridas que nada aportan a la convivencia”, afirmó el Prelado.

“Nosotros invocamos la misericordia de Dios sobre nuestra Argentina y le pedimos a la Santísima Virgen que interceda por todos mientras de corazón decimos: Jesús, salva al pueblo argentino. Escucha su clamor”, concluyó el Obispo.

 

Madre Angélica en recuperación agradece oraciones a televidentes

WASHINGTON DC, 25 Dic. 02 (ACI).- A un año del infarto que la alejó de las pantallas, la Madre Angélica, fundadora de la cadena televisiva católica EWTN, reapareció por unos minutos en su canal para agradecer a los cientos de miles de televidentes que rezaron por su recuperación.

La religiosa, visiblemente más recuperada, conversó en una grabación con el Padre Mitch Pacwa, S.J., quien la sucedió en el espacio que ella conducía. Como se recuerda, la Madre Angélica sufrió un infarto el 24 de diciembre de 2001.

El segmento, se informó, fue grabado el 16 de diciembre pasado en el monasterio de Nuestra Señora de los Ángeles en Hanceville, Alabama, donde reside la religiosa.

La Madre Angélica conversó con el Padre Pacwa sobre la providencia de Dios y cómo cada hecho que ocurre en la vida tiene un significado especial para cada uno. En este sentido, considera que su estado actual es un desafío más que Dios le ha planteado.

El Padre Pacwa, que ha visitado varias veces a la religiosa, confesó que en su último encuentro la vio muy bien.

"Su ánimo estaba muy bien y la escuché con mucha más claridad que en cualquier otro momento del año. Estaba muy dispuesta y atenta, sonreía y hacía bromas. Sabe lo que quiere decir pero a veces tiene problemas para articular sus ideas", señaló el sacerdote.

Hacia el final del segmento, la religiosa se emocionó mucho y se le escaparon algunas lágrimas. “Es muy claro que extraña su antigua tarea, extraña a esta familia que ama tanto, pero en ese momento sólo pudo desearnos una Feliz Navidad y Año Nuevo”, señaló el sacerdote.

 

Jesús espera algo más de Argentina en Navidad

BUENOS AIRES, 25 Dic. 02 (ACI).- En su mensaje navideño, Mons. Néstor H. Navarro, Administrador Apostólico de Bahía Blanca, aseguró que Jesús hecho niño espera que los argentinos no sólo se esfuercen por superar la crisis que afecta al país sino que luchen por cambiar de vida.

Tras recordar que la Navidad, “más que un simple recuerdo de un acontecimiento pasado; es la actualización de un misterio de fe”, señaló que “precisamente Jesús nació en una época parecida a la nuestra: era un mundo sin esperanza, hecho de sufrimientos, de conflictos y guerras, de tinieblas, de hambre y de gente excluida. El pecado del hombre había sembrado el mundo de violencias, de injusticias y de mentiras. Se oscurecía el porvenir y se acababa la esperanza”.

“Igual que en la primera Navidad, también para nuestra Argentina de hoy, llega Jesús como luz: La luz que ilumina y guía, da seguridad y confianza, que inspira amor”, afirmó el Obispo.

Jesús nace, explicó, “en medio de la noche oscura del pecado, del hambre y de la pobreza, en medio de las tinieblas de los conflictos de familia y de la angustia personal, de las carencias de educación, de la mala distribución de las riquezas y de los partidismos que desconocen el bien común, nace el Señor para iluminar a todo hombre que se acerque a él”.

Por todo esto, recordó que Navidad “es una fiesta de gran responsabilidad para los cristianos. Más allá de los sentimientos de ternura y emoción que despierta en nosotros; más allá de los intercambios de saludos, regalos y buenos deseos, Navidad tiene que ser para nosotros una exigencia de cambio de vida, de renacer a una fe más intensa, a una esperanza más firme, a un amor más eficaz y decidido en favor de nuestros hermanos”. “En realidad, de nada nos serviría que Jesús haya nacido hace dos mil años en la humilde cueva de Belén, si hoy nada va a nacer en nosotros”, indicó.

Regalos para Jesús

En Navidad, aseguró el Obispo, “no podemos conformarnos con armar el pesebre, adornar el arbolito o comprar la sidra y el pan dulce para comer en familia” porque Jesús espera algo más.

De todo el mundo, agregó, “Jesús espera que perdonemos a quienes nos ofendieron”, “nos acordemos de los hermanos que están solos o enfermos”; “hagamos llegar nuestra ayuda a las familias más necesitadas”; “participemos en familia de momentos de oración y, especialmente, de la Misa de Nochebuena”.

Sin embargo, precisó que Jesús espera “algo más” de “todos los argentinos”:

  • “que los que tienen poder de decisión, en el nivel donde se encuentren y en el organismo o institución donde trabajen, reconozcan que ya no se puede esperar más para atender la situación de los pobres y desprotegidos;

  • que los que tienen en sus manos grandes capitales de dinero, comercios o empresas, no olviden su responsabilidad para con los demás, y sean generadores de puestos de trabajo y de condiciones dignas para sus obreros y empleados;

  • que instauremos una cultura de diálogo entre los distintos sectores sociales, sabiendo que las soluciones no serán efecto de recetas de afuera, sino de la búsqueda sincera de todos por el bien común;

  • que la venida de ‘Jesucristo, el Justo’ (1 Jn. 2,1) nos invite a la defensa de la justicia, para que se ejerza con libertad y con rectitud, y nuestro pueblo pueda vivir en paz, garantizados sus derechos y su seguridad;

  • que no nos dejemos seducir por el interés personal y la ‘viveza criolla’, y que superemos la corrupción con opciones honestas y claras, tanto en lo público como en lo escondido de nuestras conciencias”.

En cada celebración de su Nacimiento, concluyó, “Jesús espera algo más de nosotros. Espera el regalo de un corazón disponible a su gracia que viene a nuestro encuentro para que continuemos la marcha de nuestra vida con nuevas esperanzas y nuevos compromisos, porque entendemos al fin que Él es ‘Dios con nosotros’ que camina junto a nosotros alentándonos, sosteniéndonos y amándonos siempre”.