Lunes 8 de enero

Evangelio según San Lucas, capítulo 3, versículo del 15 al 12; del 21 al 22


15 Como el pueblo estuviese en expectación, y cada uno se preguntase, interiormente, a propósito de Juan, si no era él el Cristo, 16 Juan respondió a todos diciendo: "Yo, por mi parte, os bautizo con agua. Pero viene Aquel que es más poderoso que yo, a quien yo no son digno de desatar la correa de sus sandalias. El os bautizará en Espíritu Santo y fuego.

Bautismo de Jesús

21 Al bautizarse toda la gente, y habiendo sido bautizado también Jesús, y estando Este orando, se abrió el cielo, 22 y el Espíritu Santo descendió sobre El, en figura corporal, como una paloma, y una voz vino del cielo: "Tú eres mi Hijo, el Amado; en Ti me recreo".

Comentario

16. El bautismo de Juan era para dar el arrepentimiento en que Israel debía recibir al Mesías. Véase Hech. 19, 4. Cf. Rom. 6, 1 ss.

21. No puede sorprendernos la humildad de Juan (v. 16) cuando vemos aquí al Verbo encarnado sometiéndose, para dar ejemplo, al bautismo de la penitencia.

Estos comentarios corresponden a la versión electrónica de la Biblia y Comentario de Mons. Juan Straubinger, cortesía de VE Multimedios